Tras el paso de la pandemia por el COVID-19, el mercado sanitario ha experimentado una profunda transformación, en especial en la interrelación entre cliente y empresa, espacio donde la irrupción de la tecnológica ha sido fundamental.
Igualmente destacable es el cambio de mentalidad, tanto por parte de la industria como de sus usuarios, cada vez más orientados al enfoque preventivo, prestando especial interés a la promoción del bienestar y los hábitos saludables con el fin de evitar las enfermedades, en la medida de lo posible, en lugar de tratarlas cuando ya se han desarrollado.
Así lo señala el último informe de NTT DATA, una de las compañías de servicios TI más importantes del mundo, que bajo el título “The New Health Journey: Value-based Care, Prevention and Chronic Disease Management”, analiza el estado actual de la sanidad en todo el mundo, define los grandes retos a los que las aseguradoras y demás agentes del sector deben prestar especial atención, y presenta sus recomendaciones para darles solución basándose en su enfoque global.
Tendencias de la industria
Con los recientes avances tecnológicos en materia de sanidad, la asistencia virtual está ganando terreno, eliminando cada vez más barreras del sector. Esto favorece la entrada de nuevos operadores de diversos tamaños, lo que genera una mayor competitividad.
El informe señala que hoy el ecosistema sanitario prioriza la calidad de sus servicios, frente a la cantidad de estos, mediante el seguimiento de los resultados de los pacientes. Esta tendencia conduce a la hiper personalización y a la salud integral, entre otros muchos aspectos que hay que tener en cuenta.
Retos
En este nuevo panorama, centrado en la prevención y el valor asistencial, la interoperabilidad avanza hacia el modelo de asistencia basado en el valor y en el tiempo real y, del mismo modo, gana relevancia la atención de las enfermedades crónicas. El análisis de NTT DATA indica que estamos asistiendo a un marcado desplazamiento del peso de la actividad sanitaria hacia estas últimas patologías.
En términos generales, NTT DATA ha identificado cuatro grandes desafíos a la hora de adaptarse a esta transformación, en los que las empresas tienen que centrar sus estrategias, todo ello en un contexto de digitalización acelerada:
- Mejorar la calidad de la asistencia bajo los nuevos paradigmas que posibilita la digitalización, destacando los modelos asistenciales integrales e integrados, tanto en salud general como personalizada.
- Profundizar en la experiencia del usuario y en el propio conocimiento del paciente, sin olvidar el papel clave del profesional.
- Hacer realmente efectiva la digitalización y el uso de datos, ampliándola e integrándola en todos los ámbitos de la cadena de valor de la asistencia sanitaria.
- Hacerse un hueco en el nuevo escenario competitivo, priorizando una asistencia basada en el valor y la eficiencia operativa.
Recomendaciones
Para lograr lo anterior, la consultora en tecnología también ha formulado algunas recomendaciones que ayuden a las empresas a no quedarse atrás en este nuevo ecosistema, cambiando su enfoque con intervenciones específicas:
- Las aseguradoras deben centrarse en desarrollar e implementar herramientas para promover la prevención, el bienestar y los hábitos saludables, por ejemplo, con la ayuda de asistentes virtuales. También deben fomentar la personalización y segmentación de los clientes, centrándose en la importancia de la atención de las enfermedades crónicas.
- Considerar espacios digitales, personales e interoperables donde los pacientes puedan disponer de un lugar de encuentro único, dinámico y bidireccional con la entidad sanitaria.
- Aumentar la oferta de experiencias híbridas (online/offline) al cliente, con una relación continua y satisfactoria de principio a fin (pre-atención, atención, post-atención y atención integrada).
- Mejorar la atención integral a distancia garantizando un mejor acceso a los servicios sanitarios y una mayor satisfacción de los usuarios y profesionales a través de sistemas de información clínica, Historial Clínico Electrónico (HCE) y dispositivos de monitorización remota, y que además se incorporen a la actividad presencial.
- Transitar hacia las estructuras digitales y el intercambio de datos para mejorar la interoperabilidad. Avanzar hacia el concepto de “hospital líquido”, asegurar la gestión dinámica de las áreas de hospitalización, la monitorización en tiempo real de la actividad y la capacidad asistencial de una red multiplicada.
- Implementar procesos de automatización inteligente para optimizar las actividades de administración garantizando la calidad de la atención al cliente. Introducir mejoras en todas las fases del proceso: recepción, reconocimiento inteligente de datos, triaje, procesamiento y pago.
Fuente: NTT DATA, 13 de diciembre de 2022.