Nadie está ajeno a lo que sucede a nivel mundial, lo cual nos ha obligado a tomar nuevas rutinas tanto personales como laborales. Una de ellas es el teletrabajo que, debido a los resguardos para evitar el contagio del COVID 19, ha sido la opción necesaria para que las empresas sigan operando. En este escenario, queremos mencionar los beneficios de esta modalidad en la actualidad.
Compatibilizar el rol laboral con el familiar:
Este aspecto da como resultado un trabajador más tranquilo, impactando positivamente en su productividad.
Autonomía, facilita el teletrabajo:
cada equipo puede gestionar el tiempo a su conveniencia, mejorando la conciliación personal y la felicidad del empleado, dotando de autonomía al trabajador y demostrando confianza en sus gestiones, logrando que se sienta más valorado e incrementando su satisfacción.
Reconocimiento:
El reconocer el buen trabajo se debe volver una práctica regular cuando se trabaja a distancia, provocando que nuestros colaboradores se sientan felices y motivados a seguir impulsando los objetivos.
Ahorra tiempos:
El distanciamiento de los equipos de trabajos impulsa a que los procesos sean más rápidos y específicos, dando prioridad a lo esencial y evitando la burocracia”. Los equipos se refuerzan logrando roles marcados en cada proceso.
Promueve la interacción:
Es importante promover un grato ambiente de trabajo, pero ¿cómo lo hacemos si estamos a distancia? Para esto es fundamental promover las Redes Sociales dentro de la empresa. Gracias a estas redes, se puede crear un acercamiento entre el equipo que quizás no se hubiese producido antes.
Finalmente debemos entender que el apoyo y reconocimiento a nuestros colaboradores se debe manifestar siempre y, especialmente, en momentos como este, donde existe sensibilidad social.
